Nacida en Mayo de 1844 en Pensilvania, Estados Unidos, Mary Stevenson Cassatt es una de las artistas más influyentes en la época del impresionismo. Tanto así que Gustave Geffroy (periodista francés y crítico del arte) llegó a describirla como "una de las tres grandes damas del impresionismo". Cabe mencionar que las pinturas de Mary Cassatt se caracterizan por plasmar las actividades cotidianas de las mujeres, debido a que en aquella época ver a una mujer vagando estaba mal visto ante la sociedad y Mary Cassatt provenía de una familia económicamente estable y con altos valores morales.
Debido a la época en la que a la mujer se le tenía controlada y encerrada en su casa todo el tiempo, Mary Cassatt no fue la excepción; tras luchar con su padre para dedicarse a la pintura a los 15 años logra ingresar a la Academia de Bellas Artes de Pensilvania. Sin embargo no le agradó mucho que el nivel de aprendizaje fuera lento y mucho menos el trato por parte de sus compañeros de clase y profesores por lo cual, decidió aprender de la pintura de manera autodidacta; Mary Cassatt decide comenzar una nueva vida y emprende su viaje a París, España y Holanda en 1866 en compañía de su madre; donde solicita profesores particulares como Jean- León Gérôme. Mary aprendía las técnicas copiando dibujos en el museo Louvre de París. Otros de sus profesores en París fueron Charles Joshua Chaplin y Thomas Couture. Tras dos años pintando en París, en 1868 Mary Cassatt tiene la gran oportunidad y honor de que una de sus pinturas (A Mandoline Player) fuera aceptada por un estricto jurado para el Salón de París, siendo una de las primeras mujeres estadounidenses de poder exponer sus obras en el Salón de París.
Durante esta época los impresionistas comenzaban su formación, sin embargo, Cassatt decidió seguir las tradiciones del arte y volvió a su país natal en 1870 durante la guerra Franco- Prusiana. En Nueva York logró exponer dos de sus obras en la galería de Nueva York, sin embargo, ya extrañaba las grandezas europeas por lo cual interrumpió su vocación hasta que volviera al viejo continente.
Su regreso a Europa en 1871 con la compañía de otra artista cuyo nombre era Emily Sartain; en 1872 en Italia, una de sus pinturas (Two women throwing flowers during carnival), fue comprada en el Salón de Parma, posteriormente fue un año a España donde pintó en Madrid y Sevilla, sin embargo añoraba los aires franceses por lo cual decidió establecerse nuevamente en París en 1874.
En 1877, Edgar Degas la invita a mostrarle sus pinturas a los impresionistas, donde tenían a un miembro femenino en el grupo, Berthe Morisot, quien se convirtió en amiga y colega de Mary. Debido a la ilusión y admiración que sentía Mary por Edgar Degas, acepta su invitación para exponer sus pinturas en una exhibición de los impresionistas en 1879, además de que Degas, fue gran influencia para sus pinturas. Convirtiéndose así miembro del grupo que estaba causando escándalos en la sociedad francesa debido a su informalidad en el uso de técnicas que no eran nada comunes para ese entonces en el arte. En aquella exhibición de 1879, Cassat expuso once obras y obtuvo ganancias que las destinó para adquirir una obra de Degas y otra de Monet. Continuó siendo parte del círculo impresionista hasta 1886, cuando volvió a Estados Unidos donde siguió exponiendo sus obras en las galerías de Nueva York, donde después dejó de someterse a géneros artísticos para comenzar a experimentar con otras técnicas.
En 1914 queda siega tras sufrir de diabetes y reumatismo. Finalmente muere en 1926 el 14 de Junio en el castillo francés de Beaufresne.
Mi obra favorita de Mary Cassatt es Lydia Crocheting in the Garden at Marly, pintada en 1880. Es un retrato de pintura al aceite que se encuentra en el Museo Metropolitano de Arte en Nueva York. Como se había mencionado anteriormente, las pinturas de Cassatt son caracterizadas por pintar la vida cotidiana de las mujeres; y en este retrato no es la excepción. Pues se puede observar a una mujer tejiendo en algún jardín con un hermoso vestido azul y un gorro blanco cubriendo su cabello. La pintura logra causar en mí un sentido de paz y tranquilidad debido a que la mujer se muestra bastante relajada y concentrada en su crochet, creo que los colores que Mary Cassatt utiliza ayuda a captar la luz y las dimensiones del fondo de la pintura en el jardín con los arbustos verdes y el camino de tierra tras la mujer, dando la impresión de que se encuentra en un lugar pacífico.
Puedo concluir que la admiración que siento por Mary Cassatt es enorme, pues en aquellas épocas que una mujer lograra hacer lo que le gustaba en lugar de dedicarse a atender la casa como solía acostumbrarse, es motivo de valentía y constancia por conseguir los sueños que se quiere a pesar de ser mujer y de los estratos morales que se solían acatar ante los hombres en el siglo XIX.
Fuentes de información:
Debido a la época en la que a la mujer se le tenía controlada y encerrada en su casa todo el tiempo, Mary Cassatt no fue la excepción; tras luchar con su padre para dedicarse a la pintura a los 15 años logra ingresar a la Academia de Bellas Artes de Pensilvania. Sin embargo no le agradó mucho que el nivel de aprendizaje fuera lento y mucho menos el trato por parte de sus compañeros de clase y profesores por lo cual, decidió aprender de la pintura de manera autodidacta; Mary Cassatt decide comenzar una nueva vida y emprende su viaje a París, España y Holanda en 1866 en compañía de su madre; donde solicita profesores particulares como Jean- León Gérôme. Mary aprendía las técnicas copiando dibujos en el museo Louvre de París. Otros de sus profesores en París fueron Charles Joshua Chaplin y Thomas Couture. Tras dos años pintando en París, en 1868 Mary Cassatt tiene la gran oportunidad y honor de que una de sus pinturas (A Mandoline Player) fuera aceptada por un estricto jurado para el Salón de París, siendo una de las primeras mujeres estadounidenses de poder exponer sus obras en el Salón de París.
Durante esta época los impresionistas comenzaban su formación, sin embargo, Cassatt decidió seguir las tradiciones del arte y volvió a su país natal en 1870 durante la guerra Franco- Prusiana. En Nueva York logró exponer dos de sus obras en la galería de Nueva York, sin embargo, ya extrañaba las grandezas europeas por lo cual interrumpió su vocación hasta que volviera al viejo continente.
Su regreso a Europa en 1871 con la compañía de otra artista cuyo nombre era Emily Sartain; en 1872 en Italia, una de sus pinturas (Two women throwing flowers during carnival), fue comprada en el Salón de Parma, posteriormente fue un año a España donde pintó en Madrid y Sevilla, sin embargo añoraba los aires franceses por lo cual decidió establecerse nuevamente en París en 1874.
En 1877, Edgar Degas la invita a mostrarle sus pinturas a los impresionistas, donde tenían a un miembro femenino en el grupo, Berthe Morisot, quien se convirtió en amiga y colega de Mary. Debido a la ilusión y admiración que sentía Mary por Edgar Degas, acepta su invitación para exponer sus pinturas en una exhibición de los impresionistas en 1879, además de que Degas, fue gran influencia para sus pinturas. Convirtiéndose así miembro del grupo que estaba causando escándalos en la sociedad francesa debido a su informalidad en el uso de técnicas que no eran nada comunes para ese entonces en el arte. En aquella exhibición de 1879, Cassat expuso once obras y obtuvo ganancias que las destinó para adquirir una obra de Degas y otra de Monet. Continuó siendo parte del círculo impresionista hasta 1886, cuando volvió a Estados Unidos donde siguió exponiendo sus obras en las galerías de Nueva York, donde después dejó de someterse a géneros artísticos para comenzar a experimentar con otras técnicas.
En 1914 queda siega tras sufrir de diabetes y reumatismo. Finalmente muere en 1926 el 14 de Junio en el castillo francés de Beaufresne.
Mi obra favorita de Mary Cassatt es Lydia Crocheting in the Garden at Marly, pintada en 1880. Es un retrato de pintura al aceite que se encuentra en el Museo Metropolitano de Arte en Nueva York. Como se había mencionado anteriormente, las pinturas de Cassatt son caracterizadas por pintar la vida cotidiana de las mujeres; y en este retrato no es la excepción. Pues se puede observar a una mujer tejiendo en algún jardín con un hermoso vestido azul y un gorro blanco cubriendo su cabello. La pintura logra causar en mí un sentido de paz y tranquilidad debido a que la mujer se muestra bastante relajada y concentrada en su crochet, creo que los colores que Mary Cassatt utiliza ayuda a captar la luz y las dimensiones del fondo de la pintura en el jardín con los arbustos verdes y el camino de tierra tras la mujer, dando la impresión de que se encuentra en un lugar pacífico.
Puedo concluir que la admiración que siento por Mary Cassatt es enorme, pues en aquellas épocas que una mujer lograra hacer lo que le gustaba en lugar de dedicarse a atender la casa como solía acostumbrarse, es motivo de valentía y constancia por conseguir los sueños que se quiere a pesar de ser mujer y de los estratos morales que se solían acatar ante los hombres en el siglo XIX.
Fuentes de información:
- Ferrer, S. (2011). Impresionismo femenino, Mary Cassatt (1844-1926). Octubre 15, 2016, de Mujeres en la historia Sitio web: http://www.mujeresenlahistoria.com/2011/06/impresionismo-femenino-mary-cassatt.html
- s.i. (1999). Mary Cassatt. Octubre 15, 2016, de Busca Biografías Sitio web: http://www.buscabiografias.com/biografia/verDetalle/3077/Mary%20Cassatt
- s.i. (2016). Mary Cassatt. Octubre 15, 2016, de Wikipedia Sitio web: https://es.wikipedia.org/wiki/Mary_Cassatt